El
yihadismo entendido como islamismo militante y violento no es un fenómeno
reciente. Ni siquiera puede vincularse temporalmente a los atentados del 11 de
septiembre de 2001 o a su precuela de la década precedente. De hecho, sus inicios
son muy anteriores, pudiendo trazarse desde finales de la década de los
cincuenta o comienzos de los sesenta del siglo pasado. Y si, realmente,
queremos saber cuáles son sus auténticas raíces deberíamos de remontarnos a un
personaje del siglo XIX, llamado Yamal al Din al Afghani quien, pese a no ser
precisamente, un filósofo o un intelectual de primera línea, fue el iniciador
del islamismo político, o lo que es lo mismo, la ideología que busca en los
principios verdaderos del Islam una forma de regeneración social.