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| Atasco de refugiados de Mosul |
Las banderas negras con
letras en blanco ondean allá por donde siembran su destrucción. Escritas a
mano, con una torpe caligrafía alardean de su “leit motiv”, No hay otro Dios más que Dios y Mahoma es su
profeta. La frase que, aparentemente, es de lo más inocua, sin embargo,
contiene en si, no sólo la profesión de fe de todo aquel que se convierte al
Islam, sino el sello de lo único que interesa a sus defensores, es decir, que
aquel que la pronuncie, una única vez, se convierte en musulmán, quiera o no. Es
la marca a sangre y fuego que los más brutales de los terroristas islamistas
del ISIL están dejando a su paso.
Si las alarmas saltaron en Iraq, hace pocos meses, con la
toma de las ciudades de Falluya y Ramadi, de mayoría sunita opuestas al régimen,
cada vez más corrupto e incompetente, del chiíta al Maliki, y se han ido
incrementado con las denuncias de los kurdos de Siria sobre el avance imparable
a través de la frontera occidental de Iraq hacia la región siria de Raqqah, hoy
sabemos que han logrado su mayor éxito estratégico y militar, un hito que, caso
de no ser remediado de manera contundente y rápida puede suponer la caída de
todo Iraq, salvo el Kurdistán, en manos del fanatismo terrorista
islamista del “Estado Islámico de Iraq y Levante”.
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| La autora no comparte en absoluto lo que esta bandera simboliza. Sólo se muestra como parte de la información. |
MOSUL
HA CAÍDO EN MANOS DEL ISIL.
La bella Nínive a orillas del Tigris, la segunda
ciudad más importante de Iraq con más de dos millones de habitantes, ha sido
víctima de una disputa territorial entre el Gobierno Regional del
Kurdistán y el gobierno de Baghdad, que
ha impedido un acuerdo por el cual, las mejores y más preparadas tropas kurdas
de los peshmergas podrían haber colaborado de manera eficaz en la defensa de la
ciudad. Tampoco puede eximirse de culpabilidad a la desidia de la Comunidad
Internacional que no ha atendido las miles de peticiones de ayuda que los
kurdos de Siria y de la oposición laica llevan realizando para frenar el avance
imparable e inexorable de estos fanáticos y de las advertencias que los
analistas y observadores venimos realizando sobre este peligro.
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| Vista de Mosul cruzada por el Tigris |
Los integrantes del ISIL, aspiran a la
instauración de un régimen islámico en el Iraq sunnita y en toda Siria, para
imponer la Sharia y campar por sus respetos con total impunidad. Su negación
absoluta de los derechos humanos, el empleo habitual de bombas trampa, la
aplicación de torturas, amputaciones y demás penas crueles son su seña de
identidad. Como todos los grupos yihadistas no creen ni aceptan las leyes y
normas humanas y triunfan en los territorios donde la falta de control militar
gubernamental les permite moverse con libertad. Si pudieron entrar con relativa
facilidad en la provincia de Ramadi fue gracias al descontento de su población
con la imposición del gobierno chiíta en Baghdad. Los líderes tribales les
franquearon la entrada, quizás sin ser muy conscientes de que su presencia no
iba a ser más positiva que la del gobierno iraquí. Si en Siria han ido
conquistando terreno a velocidad de vértigo ha sido por la retirada de las
tropas de Bashar, más preocupados en defender baluartes estratégicos y por la
permisividad de los turcos que les permiten entrar a través de sus fronteras.
La
desidia y los errores anteriores han provocado una huida masiva de los habitantes
de Mosul hacia el Kurdistán. De momento
son unas 5000 familias pero no tardarán en ser muchas más. A una nueva crisis
humanitaria se une el temor de que, con los refugiados se hayan camuflado
terroristas. Hasta el momento el ISIL sólo ha podido actuar en Kirkuk, otra
ciudad en disputa entre el Gobierno del Kurdistán y Baghdad, y nada les
satisfaría más que poder entrar en el Kurdistán y sembrar el caos.
Si
el ISIL se consolida en Mosul y consigue conquistar la zona occidental y la
noroccidental de Iraq, la configuración territorial surgida tras la Primera Guerra Mundial se vería
altamente modificada, ello por no mencionar que los terroristas seguirían
avanzando por el resto de Oriente Próximo y el Magreb.
Iraq
es un país construido de manera artificial que se resquebraja. Siria se
encuentra fragmentada en zonas de control gubernamental, de la oposición laica,
de los kurdos de la YPG y los islamistas. Ya nada es lo que era antes de los
levantamientos del 2011. Pero, lejos de haberse logrado una mayor democracia y
justicia en la región se extiende el caos y el terror. Y no olvidemos que las
fronteras del sur de Europa no están tan lejos. Los inmigrantes ilegales son
sólo otra manifestación más de la magnitud de un problema que si no se
soluciona de raíz afectará a más de uno o dos países y a más de una región. Por
eso, SOS MOSUL, YA.
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